ALFREDO GARCÍA BECERRA
En Ciudad Mante, Tamaulipas, Sonia Mayorga López cada año, con la llegada del “Día del Niño”, Sonia se dedica a llevar sonrisas y dulces a los niños de las comunidades cañeras, una tradición que ha mantenido por siete años consecutivos.
Este año no fue la excepción, con una pequeña bolsa de dulces, les llevó a los niños que esperaban con ilusión. La gratitud que siente por la oportunidad de celebrar otro año más llevando alegría a los pequeños, refleja su compromiso, compartiendo no solo golosinas, sino también momentos de alegría y felicidad.
En este contexto, la labor altruista de Sonia resalta. Su iniciativa personal se ha convertido en un evento anual que los niños esperan con ansias, sabiendo que, más allá de los dulces, lo que realmente recibirán es un momento de atención y cariño que quedará grabado en sus memorias.
Su mensaje es claro: compartir la alegría es una forma de agradecer por las bendiciones recibidas. Y en el rostro de cada niño que sonríe al recibir su bolsa de dulces, se refleja la esencia de lo que significa el “Día del Niño”: una celebración de la inocencia, la esperanza y la alegría de vivir.
¡𝐅𝐞𝐥𝐢𝐜𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬, 𝐦𝐢𝐬 𝐪𝐮𝐞𝐫𝐢𝐝𝐨𝐬 𝐧𝐢ñ𝐨𝐬! 𝐄𝐬 𝐮𝐧 𝐡𝐨𝐧𝐨𝐫 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐦í 𝐩𝐨𝐝𝐞𝐫 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢𝐫 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐚𝐥𝐞𝐠𝐫í𝐚 𝐲 𝐜𝐞𝐥𝐞𝐛𝐫𝐚𝐜𝐢ó𝐧 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐬𝐭𝐞𝐝𝐞𝐬.
